Thursday 30 May 2013
Canibal Vegetariano - Comentario de Gabriel Eterovich
CANIBAL VEGETARIANO.
Croacia. Branko Schmidt.2012.
Danko Babich es un ambicioso y amoral ginecólogo en una Clínica de Fertilidad líder en Croacia. Un policía y un forense suelen cubrir sus fechorías al tiempo que Babich se vuelve cada vez más dependiente del alcohol y de las drogas. Comienza a realizar abortos ilegales a prostitutas a cambio de cuantiosísimo dinero de Jelinko, líder mafioso de prostitución y tráfico de drogas en Zagreb. Sus irresponsabilidades son de tal magnitud que, en un momento la policía comienza a sospechar pero una vez más sus contactos no sólo lo salvan de ir a prisión sino que lo erigen como Director de la Clínica...
El personaje de Danko tiene una maldad aviesa, en un análisis sociológico podríamos significar la dualidad del hombre moderno,con las libertades y el confort "ad-limitum" y a la vez, y,por añadidura preso y adicto de sus deseos; pero creo que Branko Schmidt su director va un poco mas allá de representar a un hombre ruín, corrupto e hiperambicioso... como su maldad, hasta la simple actitud, sin sentido, de "matar un feto" de 5 meses de una primípara de 45 años, no permitir un aborto de un desarrollo intrauterino geneticamente complicadísimo cuando todos sus compañeros habían firmado su complacencia; inculpar a un pasante sirio de equivocarse en una dosis de anticoagulante, etc... todo ésto marca a un ser perfecto... perfectamente ruín; Danko no tiene su "lado bueno" es un profesional capaz pero todo en él es maldad, la atención a sus pacientes, el trato con sus compañeros, con sus alumnos, la relación íntima con un par de mujeres; ésto me lleva a pensar que, directamente su director ha querido mostrarnos una vez más una metáfora del mal; la figura de un Fausto, el Mal en este caso representado en un exitoso ginecólogo en la Croacia de hoy, en donde la corrupción parecería que lo oculta todo, absolutamente todo, si bien en su cuarto hay empotrado un crucifijo y en el vehículo del corrupto Jefe de Policía cuelga un rosario; el director nos muestra que, éstos no son tiempos de solidaridad ni de inclusión ni de respeto.
La película,que, reitero, me parece significar la figura de un Fausto contemporáneo es vibrante, con una estética hiperrealista (vale la pena aclarar al espectador pues casi la mitad del filme se desarrolla en un quirófano de Obstetricia con abundancia feroz de primerísimos planos).
Los créditos actorales son impecables empezando por su protagonista Rene Bitorajac a quien empezamos a odiar apenas transcurren 10 minutos del filme...
Las escenas finales nos invitan a pensar que... "todo está perdido en el postmodernismo contemporáneo..." pero ni al personaje ni a muchos pareciera importarnos, como la escena donde Danko karaokea con su batería de latón en la sórdida luz de su moderno apartamento.Termina de "acompañar" el sonido que sale de su I-Pod, se levanta y hace mutis por un costado. Como si aquí "no hubiera pasado nada". Apagón final.
Gabriel Eterovich
Subscribe to:
Post Comments (Atom)
No comments:
Post a Comment